#bateriadelinks: fútbol, machismo, violencia y homofobia

– Esta semana nos hemos llevado varias dosis de violencia de diferentes formas, pero siempre con los mismos enemigos: las mujeres y los homosexuales. El que aquí escribe tiene un especial asco por el fútbol: puedo entender perfectamente la afición por algún deporte, pero como me he criado en un país en el que el fútbol va más allá y se convierte en un espectáculo que defiende una serie de valores totalmente contrarios al espíritu deportivo, me es difícil comulgar. Creo que, en el caso de que me interesara ver algún partido, no lo haría por lo que tiene alrededor. Esta semana han salido a la luz unas imágenes de un partido del Betis en el que la afición mostraba su apoyo a un jugador, Rubén Castro, que está en pleno proceso judicial por terrorismo machista contra su ex novia. En las imágenes, se oye cómo estos subhumanos cantan: “¡Rubén Castro alé, Rubén Castro alé, no fue tu culpa, era una puta, lo hiciste bien!”. Y más grave: el club sólo ha empezado a investigar cuando las imágenes han salido en los medios, porque la multa se la come el club por permitir estos hechos. En Informativos Telecinco oigo que lo llaman cántico machista, pero creo que va un poco más allá: es apología del terrorismo. Terrible. Solo espero que empiecen a rodar cabezas por estas mierdas.
– Seguimos con el fútbol (luego volveremos con más violencia), aunque con algún brote verde. La Federación Estatal de Gays, Lesbianas, Transexuales y Bisexuales ha lanzado la campaña Liga Arco Iris para luchar contra la homofobia en el fútbol, pidiendo a jugadores y clubes que se unan mediante una acción simbólica: ponerse unos cordones multicolores en sus zapatillas en los partidos. Una iniciativa muy necesaria en el único gremio del mundo sin maricones. Y es necesaria porque las declaraciones y actitudes homófobas por parte de los profesionales son recurrentes. Hasta aquí todo bien, pero hay un detalle: la Liga de Fútbol Profesional no colabora con la campaña. Solo este (no) gesto resume muy bien la situación. El primer equipo en sumarse ha sido el Rayo Vallecano, que está demostrando que lo suyo es el fútbol y, sobre todo, los valores: todos recordamos cómo ayudaron a la señora que fue desahuciada hace unos meses en Vallecas. Se han sumado equipos pequeños y de divisiones inferiores, pero algo es algo. Charlando via Twitter con Daniel de Discos FUP me cuenta que esto es una cosa muy de fútbol europeo. Al parecer, en EEUU, donde además el fútbol femenino tiene consideración de deporte y no de hobbie, son habituales las salidas del armario, el apoyo de la liga a campañas contra la homofobia y demás, castigando por ejemplo a los sponsors que muestren actitudes homófobas. Para cerrar el apartado deportes, me he quedado picueto con esta historia de Serena y Venus Williams: resulta que tras recibir insultos racistas en 2001 en un partido del torneo de Indian Wells (uno de los más importantes del circuito) decidieron boicotear y no volver a participar, con la renuncia económica y de ranking que ello supone. Este año vuelven, tras 14 años de lecciones de defensa de sus principios. Muy bien por ellas.
– La violencia contra las mujeres se ejerce de varias maneras. Diana Aller, una ídola, habla en una de sus últimas entradas de dos ejemplos de acoso y derribo a dos grupos de mujeres muy diferentes (pero seguro que hay algún cruce entre ellas): las doulas, esas mujeres que acompañan a otras mujeres durante el embarazo y el parto, de actualidad por un informe del Consejo General de Enfermería que las pone a caer de un burro, y por otra parte las fans de 50 Sombras de Grey, vilipendiadas en la prensa, convertidas en víctimas de las miradas desde encima del hombro del mundo serio y que vale y que no es maruja ni boba. Esto de las fans de 50 Sombras de Grey me recuerda a un artículo (que borraron) de Feministas Ácidas en el que teorizaban sobre la ridiculización de todo fenómeno fan mayoritariamente femenino. La respuesta, la de siempre: el patriarcado no puede aceptar que haya espacios de desarrollo para la mujer son interferencias de algún macho que las pastoree, así que en vez de dejar que hagan sus cosas, se ríen de ellas y las ridiculizan. Menos mal que internet es lo que es y el artículo no se ha perdido. Quizá el caso de violencia más espeluznante de la semana sea el de María Gil de Antuñano, una mujer separada y maltratada cuyo marido ha pedido la nulidad matrimonial. Ella es católica practicante y no cree en la nulidad, pero la Iglesia, lejos de apoyar al débil, ha puesto en duda la cordura de María y en las entrevistas para conceder la nulidad le hicieron preguntas tan elegantes como «¿Seguro que usted no le provocaba?» o directamente afirmaciones insultantes como «Usted se casó porque se quedó epatada con el dinero de Alberto». Una delicia la Iglesia, ¿eh?
– A veces leo cosas como este artículo de opinión de Javier Gallego y disfruto y me corroe una envidia (que no sé si puede ser sana) por ser capaz de resumir algunos de mis pensamientos de manera tan clara. Ojo a la cita de Rosalía de Castro, y cuidado con la de Fray Luis de León.
– Y de vuelta a la homofobia, dos sucesos más: lo de la circular de Metro de Madrid que instaba a prestar especial atención a los homosexuales, reviviendo la Ley de Vagos y Maleantes de golpe y plumazo, ha sido resuelto en una semana con destituciones y con un poquito de maquillaje en forma de reunión con colectivos. Y lo de The Walking Dead. Esta serie la dejé en la primera temporada y no sigo nada de lo que pasa, pero al parecer en su nueva temporada hay una pareja de homosexuales y en un capítulo se dan un beso y ha sentado fatal a un sector de sus fans. Imagino que al sector de trogloditas.
– No podía faltar la ronda de mujeres famosas vilipendiadas. Madonna ha sido la más lista, y tras ser vetada por ser vieja en una radio inglesa ha subido una secuencia a Instagram de hace 20 años en la que resume todo muy bien sin necesidad de decir nada más. Básicamente se preguntaba que cuáles son las cosas de jóvenes y las de viejas. Muchos aplausos para ella. Jane Fonda es una mujer muy guay, y en este reportaje dice las cosas también como son: que sí, que está estupenda, y que es porque se ha operado y que no va a negarlo jamás y que es una decisión personal. Y habla de manera muy abierta de sus matrimonios y su supuesta sumisión. Por su lado, en la Generación Beat hubo mujeres, pero la Historia se encargó de meterlas en el olvido. Menos mal que ahora tenemos Herstory y se publica en castellano una antología de estas mujeres para intentar colocarlas donde corresponde. Y luego está la líder de la Alianza de la Izquierda Democrática de Polonia, Magdalena Ogorek, que está buena y ha estado en Madrid en unas jornada de socialdemócratas europeos y por supuesto ningún medio ha podido dejar de resaltar eso. Eso no es que lidere un partido que lo puede petar en un país tremendamente conservador. Eso es que está buena. Desde incluir una palabra que no está en el eslógan del partido (en Telecinco cambian «el rostro de la esperanza polítca» por «el (muy bello) rostro de la esperanza política») hasta afirmar que es sexy. Informaciones serias, de calidad, y el machismo no existe y son todas unas feminazis y unas agobiadas y si está buena que se aguante.
– Ya he hablado en otra batería de links de hombres feministas de dudoso pelaje. Hoy todo lo contrario: en el diario uruguayo La Red 21 leí este artículo sobre la falta de referentes masculinos que me gustó mucho, una reflexión inteligente sobre la situación de cambio que muchos se niegan a reconocer y a otros nos cuesta pero intenamos poner empeño. La situación del hombre feminista está muy bien contada por Álvaro M. Sánchez en esta entrada de su blog, titulada de manera muy honesta Soy machista. Portlandia también ha abordado el tema con muchas risas 🙂 esta semana.
– Tras su hit LOCAS DEL COÑO, el de Nada Importa la ha vuelto a cagar en su blog de GQ con unos premios cargaditos de campeonismo, cuñadismo, crackismo y todismo llenos de homofobia y machismo. Hay capturas de pantalla por ahí, la entrada ha sido borrada.
– En el apartado de boberías y desengrasantes nos encontramos esta semana dos cosas muy feas y divertidas a la vez. Al PP se le ven las miserias a kilómetros de distancia, y uno a las 2 de la tarde podría reproducir el e-mail del día que reciben sus miembros con las pautas a seguir en tertulias y comparecencias, porque son como loros y lo repiten por todos lados. Como les salen peligros por todas partes, ahora le ha tocado el turno a su nuevo competidor por la derecha, Ciudadanos. Ya dije la semana pasada que no me gustaría verme en la tesitura de defender a C’s, y no lo voy a hacer. Pero quería comentar lo bobito que es Carlos Floriano, que ni aprenderse cuatro líneas de actuación puede. En una de sus actuaciones de stand-up comparecencias, el señor acató las órdenes del partido y se refirió al partido de Albert Rivera por su nombre en catalán, Ciutadans. No es muy complicado, ¿no? CIU TA DANS. Ciudadanos. Casi iguales. Pero la cabeza de Floriano funciona de otra manera y al poner en práctica su burdo intento de relacionar catalán con maldad le dio la vuelta al asunto y lo convirtió en una muestra de su falta de talento. Dijo unas 200 veces ciudatans. CIUDATANS. Me meo. Y la segunda cosa fea es las terribles consecuencias del selfie. En EEU ha saltado la noticia de que hay un grave aumento de piojos por la práctica del selfie. Eso de mezclar pelos es un drama. Esto sale ahora, en febrero de 2015, pero en marzo de 2014 una experta en el tema ya avisó. Y parece que nadie le hizo caso 😦
– Siempre hay que terminar con cosas guays. Esta semana dejo un vídeo de uno de los grupos que más ganas tengo de ver en el PS, las Babes in Toyland.